
Lloraré mi muerte austera
y ahí estará mi soledad
lloraré a mis quimeras
y no vendrá nadie más
Vendrá la bruma a este lar
vendrá el viento a rezar
y los cipreses se alzarán
y cogeran sus raíces mi alma
y nadie lo impedirá
Se acercarán las golondrinas;
la brisa las llevará,
y vendrán rosas y amapolas
mas no serán de tus manos
ni sobre mi tumba posarán.
Vendrá el otoño y el silencio
la armonía y la primavera
la tempestad y el recuerdo
y seguirás ahí, compañera
para regalarme versos
para beberte mis penas.
Si... es muy triste... Saludos.